Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos y la Administración de Drogas y Alimentos han recomendado que se suspenda el uso de la vacuna monodosis de Janssen.
Se trata de una pausa cautelar mientras se investiga si hay relación directa entre la administración de la vacuna y los síntomas desarrollados por seis mujeres entre 18 y 48 años en un plazo de dos semanas tras ser inmunizadas con un tipo de de coágulo sanguíneo «raro y grave».
Los expertos del comité científico del Gobierno temen que una respuesta inmunológica provocada por la vacuna pueda ser la causa. La FDA y los CDC explican en un comunicado conjunto que recomiendan detener la vacunación con Janssen “por precaución”.
Una sanitaria prepara una jeringuilla con la vacuna de Janssen. Por ende sanidad destinará la vacuna de una sola dosis de Janssen a las personas de 70 a 79 años.
Sobre el hipotético impacto que un parón en el proceso de vacunación pueda tener en la reanudación completa de la actividad económica, el consejero económico de la Casa Blanca Jared Bernstein ha señalado hoy que es demasiado pronto para calcular el impacto y que hará falta más información para que las autoridades sanitarias evalúen todos los datos.
“Ahora mismo, no se ha establecido ninguna relación causa-efecto clara entre estos raros episodios y la vacuna Janssen”, el nombre de la filial farmacéutica que desarrolla la vacuna.
El trombo asociado a la vacuna de Johnson & Johnson, denominado trombosis de senos venosos cerebrales, es especialmente raro. Es el segundo revés para la compañía, que a finales de marzo se vio obligada a destruir un lote de vacunas en una fábrica de Baltimore gestionada por una subcontrata, tras comprobarse que los trabajadores habían contaminado accidentalmente un lote equivalente a 13-15 millones de dosis.
El 22% de los estadounidenses están totalmente vacunados contra el coronavirus, y el 36% ha recibido al menos una dosis de la vacuna. Antes de la suspensión cautelar del fármaco de Johnson & Johnson, los planes de la Administración de Joe Biden contemplaban que toda la población adulta del país estuviera inmunizada para finales de mayo.
Las autoridades sanitarias federales han advertido también este martes de que los raros trombos supuestamente causados por la vacuna «necesitan un tratamiento diferente del habitualmente prescrito» en estos casos, la heparina.
“Pero en este caso, la administración de heparina puede ser peligrosa, y se necesitan tratamientos alternativos”, han manifestado los CDC y la FDA en el comunicado.
Redactado por: Paola Correa